Los trabajadores y trabajadoras que prestan servicios a bordo y de logística en tierra de los trenes AVE y Larga Distancia, subcontratados por la empresa pública RENFE al monopolio Ferrovial desde finales de 2013, saben bien lo que es practicar la solidaridad entre compañeros/as al aceptar una rebaja salarial del 5,25% durante dos años para reducir el impacto de un ERE con el que se estrenó Ferrovial y que pretendía el despido de más de 400 trabajadoras/es. Aún así, la empresa despidió a 75 compañeras/os. Ahora, tras más de un año de “negociaciones”, la empresa anuncia que la plantilla ha perdido incluso las mínimas condiciones que les ofrecía el último convenio colectivo. No satisfechos con esto, y bloqueando el avance de un nuevo convenio, dictan un ERTE que desde abril reduce entre un 10% y un 17,5% jornadas y salarios de 452 trabajadores/as. Ya nos vamos dando cuenta para qué legislan sus contrarreformas laborales los distintos gobiernos al servicio de la patronal.
Las medidas impuestas y los miserables incrementos salariales propuestos por Ferrovial sólo pretenden que la plantilla continúe perdiendo derechos laborales y poder adquisitivo, cumpliendo así lo que en el capitalismo es una ley invariable: la devaluación de la fuerza de trabajo como mecanismo para incrementar los suculentos beneficios del patrón. Ferrovial, fundamentalmente parasitando recursos públicos, ganó oficialmente 1.498 millones de € netos entre 2014 y 2016, mientras este colectivo de trabajadores/as era obligado a financiar con salarios, condiciones laborales y despidos los pingües dividendos de sus accionistas.
Los y las trabajadoras sabemos que sin nosotras/os no se sirve un croissant ni se cuida a un/a menor o dependiente en ruta, en definitiva, no se mueve un solo engranaje. Así lo han demostrado durante las huelgas de marzo y abril pasados, que contaron con la masiva participación de las plantillas y, precisamente por ello, Ferrovial recurrió a un mafioso esquirolaje para minimizar su efecto. Y esta plantilla lo volverá a demostrar con las jornadas de huelga convocadas para los días 1 al 5 de Mayo.
¡Compañeras y Compañeros de los Servicios a Bordo de RENFE! Aunque cada cual con sus peculiaridades, la raíz de todos los conflictos es la misma: un sistema decadente que sólo puede alargar sus días recurriendo a la sobreexplotación de quienes todo lo producimos. En este 1o de Mayo vuestra lucha decidida y a la ofensiva es un ejemplo para toda la clase trabajadora. Cuando la representación sindical actúa unida y en defensa de los intereses de toda la plantilla, que decide soberanamente sobre su conflicto a través de las asambleas de trabajadores/as, somos capaces de ganar cualquier batalla, sin importar el tamaño ni el poder de la empresa cuya riqueza generamos.
Los CUO (Comités para la Unidad Obrera) no somos un sindicato pero sí desarrollamos acción sindical activa, pública y propia. Somos trabajadores y trabajadoras que luchamos por forjar la unidad de la clase obrera con independencia de la sigla sindical a la que, si es el caso, nos encontremos afiliados/as. Pensamos que los problemas de la clase obrera sólo encontrarán solución desde la unidad de todos y todas las trabajadoras, decidiendo soberanamente sobre sus propios conflictos en las asambleas de centro de trabajo o empresa. Si las empresas se unen para arrebatarnos derechos, nosotras y nosotros debemos unirnos para impedírselo, y organizarnos para arrancarle a la patronal condiciones laborales que aseguren una vida digna para quienes todo lo producimos.
¡¡¡LA LUCHA ES EL ÚNICO CAMINO!!!
¡¡¡NO A LAS PRIVATIZACIONES NI A LAS CONTRATAS!!!
¡¡¡LA UNIDAD ES LA FUERZA DE LA CLASE OBRERA!!!
¡¡¡TRABAJADORA, TRABAJADOR, ORGANÍZATE EN LOS CUO!!!