En todo el Estado hay aproximadamente 23.000 profesoras/es universitarias/os con contratos de “Asociado”. Según la Ley, el profesorado asociado está formado por “profesionales de reconocido prestigio que aportan su experiencia” y deberían impartir asignaturas relacionadas con su especialidad laboral. Pero la realidad es bien distinta. En los últimos años el Gobierno no permitió a las Universidades sacar plazas de profesorado suficientes para cubrir las necesidades docentes, disparándose el número de contratos de asociados a la vez que se pervertía la propia figura: una buena parte de las/os asociadas/os carga sobre sus espaldas con gran cantidad y variedad de docencia a cambio de retribuciones de miseria (entre 400 y 600 € mensuales). En otras palabras, las Universidades utilizan al profesorado asociado para abaratar plantillas a costa de su precarización.
Aunque la ley obliga a que el profesorado asociado, que siempre lo es a tiempo parcial, tenga otro trabajo fuera de la Universidad, en muchos casos no es así, o lo tuvieron pero lo perdieron durante la crisis capitalista, o son falsos autónomos,..., asumiendo esta sobreexplotación en el intento de hacer carrera profesional dentro de la Universidad para mejorar su situación. Pero lo tienen difícil porque no se les reconoce los méritos docentes y/o investigadores necesarios para su estabilización.
En la Universitat de València el profesorado asociado inició una huelga indefinida el pasado 31 de enero, que aún continúa, y en la Universitat Politècnica de València se convocó a partir del 16 de abril. Será cuestión de tiempo que las/os asociadas/os del resto de Universidades se pongan en pie de guerra, porque las condiciones son insoportables. Hay posibilidades para incorporar nuevo personal con contratos más estables y menos precarios: ¡exijamos que se utilicen!, en defensa de los/as trabajadores/as y de la propia Universidad Pública.
¡¡¡Apoya la Huelga del Profesorado Asociado!!!
¡¡¡Por una Universidad Pública al servicio del Pueblo Trabajador!!!